Rubias, morenas o trigueñas, mujeres hay para el querer de toda laya
Más si en lograr amor te empeñas debe ser ella una bella paraguaya
Ser paraguaya lo proclama el mirar lleno de dulzura y de ternura
El talle que al andar derrama y muele sal en la cintura
Cuando su esposo va a la guerra ella es el alma que resguarda bien su casa
Ella es el alma de su tierra, ella es el alma luminosa de su raza
Nunca veréis que haga alarde en su dolor o en su inocente regocijo
El hombre héroe o cobarde, para su amor es sólo un hijo
En esta tierra de valientes el más valiente entre valientes queda preso
Cuando sus labios sonrientes su miel de hechizo le promete con un beso
Rubias, morenas o trigueñas, mujeres hay para el querer de toda laya
Más si en lograr amor te empeñas debe ser ella una bella paraguaya
Debe ser ella paraguaya, debe ser ella paraguaya