Y cuando pasó el tiempo,
alguien se preguntó
adonde fue a parar
Natalio Ruiz,
el hombrecito del sombrero gris.
Caminaba por la calle mayor,
del balcón de su amada,
a su casa escribir
esos versos de un tiempo
que mi abuelo vivió.
¿Dónde estas ahora,
Natalio Ruiz,
el hombrecito del sombrero gris ?
Te recuerdo hoy con tus anteojos
que hombre serio paseando por la plaza.
¿De qué sirvió cuidarte tanto de la tos,
no tomar mas de lo que el medico indico,
cuidar la forma por el que diran,
y hacer el amor cada muerte de obispo
y nunca atreverte a pedirle la mano
por miedo a esa tia con cara de arpia?
¿Y dónde estas? ¿Adónde has ido a parar?
¿Y qué se hizo de tu sombrerito gris?
Hoy ocupas un lugar mas
(acorde con tu alcurnia)
en la Recoleta.