La tormenta se acerca
Y me adentro en un mar
De fango, otra vez
Poco a poco y apenas sin verla
Su hedor penetra en mi piel
A aquel que yo entregué mi amor
Me recompensa con dolor
Traición, venganza y ambición
Tranquilo, que tu frustración
No se apodera de mi ser
La belleza sin ojos me apesta
Y te atrae, cual rojo a la res
Me retuerzo y expulso esa bilis de fe
Que queda en mi hiel
Quien consiguió arrancar pasión
Hoy me aniquila el corazón
Se embauca de un simple bufón
Me aplasta un sol de decepción
Y me devuelve a perecer
Por favor, cállate...
No me recuerdes lo que tanto odié
Mírame, no lo ves...
Que tu aguijón de fuego abrasa ya mis pies
Es tal el eco del dolor
Es tan vacío su interior.
Me arrastra y nubla la razón
Quizá merezcas mi perdón
Y el daño cure alguna vez
Por favor, cállate...
No me recuerdes lo que tanto odié
Mírame, no lo ves...
Que tu aguijón de fuego abrasa ya Cállate, déjame...
Que me retuerzo en miedos que pasé
Por favor, mírame...
Tumbado aquí a tu lado
Suplicándote..., suplicándote...
Suplicándote..., suplicándote...
Cure alguna vez... cure alguna vez