(canción iv de cantares del mito americano . el texto hace referencias al libro pedro páramo (1955) de juan rulfo)
Vine a comala porque mi madre me mandó
Que buscara a mi padre, llamado pedro páramo,
Que habitaba una casa detrás de las colinas.
Juré venir a verlo no bien la sepultáramos.
Una vez sepultada me dirigí a comala,
Puerto muerto repleto de plácidos difuntos,
Vagando por podridas veredas con jocundia
Y entrando a bares muertos para trincarla juntos.
Nunca he visto en mi vida difuntos tan borrachos,
Pero me integré pronto al tosco regocijo,
Hasta que a un bebedor le pregunté si acaso
Conoció a pedro páramo y aclaró que era su hijo.
así es que soy tu hermano y me llaman abundio ,
Agregó sin rencores y ningún embarazo,
pero no se te ocurra buscarlo porque puede
Echarte de este mundo con un mero balazo .
pero yo ya estoy muerto, hermano abundio , dije,
¡y no puede seguirme matando ese canalla
Que abandonó a mi madre con apenas trece aáos
Sin su vestido oscuro y ninguna vitualla! .
así lo hizo con todos , dijo serenamente,
Secándose la frente con un paáo embebido.
¿y quién es este padre que mata a sus retoáos? .
un hombre maltratado que vive un rencor vivo .
Como vio que sudaba con un sudor brillante
Me dijo que comala era más que el infierno,
Porque algunos que habían bajado hasta la fragua
Volvieron a buscar sus frazadas de invierno.
mejor vete de vuelta, como se volvió rulfo .
Yo le dije que rulfo se había jugado la mala,
Y aunque él no me creía, le demostré con creces
Que rulfo había muerto bajo el sol de comala.