Cuando todo desfallece tú siempre estás ahí
Cuando el dolor solo crece tú siempre estás ahí
Y entregas tu calma y fuerza y no importa, nada esperas
Y vives para servir aun a costa de tu vida
Aunque todo sea duro aprendiste a sonreír
Como Orem, como Dix como Roy y Abdellah
Como Dávila y Peplau Como Mahoney y Henderson
Como Sendler como Florence Nightingale
Como tú quisiste ser Blanca luz de amanecer
Cuando la vida se estrena tú siempre estás ahí
Y cuando el alma ya vuela tú siempre estás ahí
Y aún más allá de la espera y aunque el tiempo no regresa
Y es incierto el porvenir eres ángel de la vida
El que alivia las heridas y ha aprendido a sonreír
Como Angoloti y Barton como Cavell y Seacole
Como Sanger y Firchild Como Breckinridge y Wald
Doss, Juan, Teresa como Florence Nightingale
Como tú quisiste ser Blanca luz de amanecer
Con la hermosa vocación del servicio y el amor
Con toda la inspiración de salvar sin condición
Con la paciencia que es don y el saber y la intuición
Como tú quisiste ser Blanca luz de amanecer