En el espejo de un sueño se miran Luis y su mujer sin esperanza y con miedo se arrastran a la vejez Nos marcharemos muy lejos, dice nadie nos encontrará en el juego de la vida nunca estoy donde hay que estar. No te hagas ilusiones el Infierno no es gran cosa del paraíso... no hablo nunca estuve en esa fosa. Siempre hay algo amargo al final del camino en el bosque de la noche cae la lluvia travesera del destino. Trae el humo, negra noche más espeso del Infierno que mi cuchillo no vea el trabajo que está haciendo. Fue una noche de invierno de llover cerrado y duro cuando dos almas en pena se desterraron del mundo. No te hagas ilusiones el Infierno no es gran cosa del paraíso... no hablo nunca estuve en esa fosa. Traigo buenas noticias no espero regresar jamás mi alma es agua estancada te lo juro que es verdad.