Salgo por la noche a caminar al boulevard, boulevard, boulevard. Vuelta a la cultura estimulante del boulevard, boulevard, boulevard. Postales de Pompeya, figuras chinas y hasta un cafe irlandes. CanciÛn de nochebuena de una morena silbando en su vaiven. Para mi que nadie te vuelve a mirar en el silencio de la oscuridad. Para mi que nadie te vuelve a mirar se esconden en las sombras por algo ilegal. Para mi que nada pero nadie te vuelve a mirar si escuchan la sirena que puede llegar. Para mi que nada pero nadie te vuelve a mirar si ven a la patrulla que vuelve a pasar. Cada uno tiene su vision, la mÌa la perdÌ en un callejon. Vuelta a la cultura estimulante del boulevard, boulevard, boulevard. Un loco en su historia y dos amantes contra la pared, discuten sus memoria y me preguntan algo que no se. Paseando y mirando una bola de fuego cada uno en la calle atiende su juego, miradas esquivas, miradas cercanas violines sonando hasta la madrugada, rapida comida se cuece en la esquina necesito dulces en esta salida, chicas morenas, chicas coloradas junto a sus galanes esperando en la entrada. Vuelta a la cultura estimulante del boulevard, boulevard, boulevard. Vuelta a la costumbre estimulante del boulevard, boulevard, boulevard. Paseando y mirando una bola de fuego cada uno en la calle atiende su juego, miradas esquivas, miradas cercanas violines sonando hasta la madrugada, r·pida comida se cuece en la esquina necesito dulces en esta salida, chicas morenas, chicas coloradas junto a sus galanes esperando en la entrada. Veo cruzando a la torre inglesa junto a un pabellon de la Madre Teresa, donde quedara un Deli cercano que todo termine me produce desgano.