Otra vez, pensando en ti toda la noche y no duermo, no me canse de repetir cuanto te quiero, me quede sin cigarrillos y los nervios hacen que yo me levante de paseo, hablando conmigo a solas y en silencio. Y te vi, te acercaste a saludarme que es lo menos, yo fingí ser feliz pero ante Dios que no era cierto, y trate de ocultar la emoción de mi mirada, pero el corazón que manda me decía, y al final me delataron estas palabras. Ya vez como hasta aquí yo he sobrevivido, no se que rayos me dio tu cariño, pero es que alguno tenia que perder. Ya vez mientras me encuentres mas lejos que antes, debo admitir que no podré olvidarte, no digas nada mejor cállate. La invite a tomar café en el bar en la otra esquina, acepto pero dijo poco tiempo tengo prisa, contemple que aunque había pasado el tiempo era la misma, intente tomar su mano, y no podía, y en un abrazo como amigo se despedía. Se fue y me quede tan solo en esta silla, entre la gente vi que se perdía, y ya no se si algún día la veré.