Vive a la orilla del río en algún lugar, en algún lugar En las noches de frío con una nube se suele abrigar Suenan historias de amor en su garganta de sol Suena la edad de su voz Tiene las manos curtidas de viento, de arena Pasa las tardes contando las hojas que caen, las hojas que quedan Su alma vive volando un horizonte buscando donde poder girar Su voz se escucha en el tiempo de brazos abiertos, de brazos abiertos Vive en su tierra, en la mía, en todos los días que estamos despiertos Con su guitarra azul canta canciones de luz Quizá debamos escuchar