Las noches son un mar de oleaje torvo que a veces me trae recuerdos y que recuerdos los que vuelan esta noche de donde hace tantos años se habían quedado durmiendo recuerdos que me van llegando a oleadas y sugieren otros tiempos, tiempos de más facilidad es la palabra que hoy me falta y que hace que tanto no comprendo No tengo más que un vago sentimentalismo dulce y triste pero viejo viejo como el viejo sabor de viejas lágrimas y viejo como el muro de su casa donde aparecía corriendo de la mano de su hermana cuando la estaba queriendo más que a todo lo que quise y sobre todo lo que entiendo que quiere alguien con 10 años Como me gustaba Julieta en ese entonces todo venía en otros nombres desde el amarla en secreto hasta vivir con la confianza que me amaba tras de sus ojos risueños siempre se resumía en la frase acostumbrada y para mi todo lo envolvían tres palabras ciertas como la verdad Me gustaba Julieta, me gustaba Julieta Me gustaba Julieta, cuando iba mirando a cualquier sitio sin hacerlo cuando imaginaba y se peinaba los cabellos negros negros como noches y largos, y largos como inviernos que nunca acababan de estar cerca ni estar lejos solo y tan solo a mi lado y a mi lado les recuerdo Me gustaba Julieta, cuando imaginaba que le amaba de hace tiempo cuando me escribió que era su amor cuando lo entiendo y además como cuando hoy lo rememoro dulce y triste como lágrimas y besos de mejilla y de la infancia y de hace mucho tiempo atrás Me gustaba Julieta, cuando murió su papá y se lo dijeron cuando en la sorpresa soltó el llanto y el cuaderno en donde decía que me amaba siempre y cuando fuera eterno como el sol Me gustaba Julieta, cuando la llevaron a vivir con sus abuelos cuando dejó de ir a clases con su hermana cuando una tarde como cualquier tarde gris se me fue lejos, lejos, mas allá de donde van todos los sueños que han venido desde entonces y esta noche me repiten que de niño y en las tardes me gustaba Julieta, me gustaba Julieta, me gustaba Julieta, Julieta