Es mi edén, es mi cárcel, es mi infierno, es mi cielo. Vengo dispuesto a ocupar mi puesto, y aquí me tienen, bombos y cajas con melodías me retienen. Pienso, de eso de se trata, y así se resuelve sin revólveres. Vuelvo a ver el sol, allí dejo sus órdenes, lejos de la tempestad, traigo calma, siéntela. En mi dulce fantasía, encierra cruda realidad, algo que no tiene precio en la tierra del oro. Es mi tesoro más preciado con mi último secreto. Sólo creo en lo que vi allí y en lo que toqué, en líneas que coloqué, en aquel parque, entre bloques. Tiempos difíciles, entre edificios, días grises; es la misma persecución, entre las mismas calles. Ves cruces de miradas que analizan detalles, allí, donde ya no hay leyes ni reyes a los que servir. El tiempo pasó y es fácil no recordar nada, a cada paso que doy hoy, nuevas lineas son trazadas. Sólo es Hip-Hop, música que busca algo aquí dentro, y así comprender cuál es el centro de mis movimientos. Y escuchar al tiempo, que cuenta una historia, ni fracaso ni gloria, son los días que tú odias. Es mi edén, cuando te veo bien, ves mi sonrisa. Es mi cárcel, cuando me encierro y voy con prisa. Es mi infierno, cuando el cuaderno ya no me entiende. Es mi cielo, mi despertar, sigo siendo libre. Es mi edén, cuando te veo bien, ves mi sonrisa. Es mi cárcel, cuando me encierro y voy con prisa. Es mi infierno, cuando el cuaderno ya no me entiende. Es mi cielo, mi despertar, sigo siendo libre. Aquí me ven, cruzando el puente; vine a borrar la línea, a que vean con imágenes cómo es el mundo. Miseria en Guinea, sí, vean mis cauces para guiar mareas. Lean más tareas, hectáreas que ya se rastrean; ten, es mi puro néctar conectar micrófonos. A ningun rey corono yo, tu ley en el quirófano y no profano el templo. Vuelvo a tocar tu imágen para que todo encaje, hablando con mi ángel. Sentado en mi cama en otra velada tranquila, acompañado de un cuaderno y de unos ojos que vigilan. Converso con mi almohada con versos, así es mi vida, nacido para ser MC y unir lo que otra divida. Es la salida ordenar un poco mi cabeza hueca, regalar mi lírica, salir ileso si esto vuelca. Tierra querida, fiel recuerdo de una huida. Cuida las formas y no abandones la partida, que suenan cerca, quizá el viento las trajo hasta mi puesto de trabajo. Y así es como me relajo, sin reloj extraje sólo hojas para que tú ojees. Coge mi mano y no te enojes, no, manténte al márgen. Es mi edén, cuando te veo bien, ves mi sonrisa. Es mi cárcel, cuando me encierro y voy con prisa. Es mi infierno, cuando el cuaderno ya no me entiende. Es mi cielo, mi despertar, sigo siendo libre. Es mi edén, cuando te veo bien, ves mi sonrisa. Es mi cárcel, cuando me encierro y voy con prisa. Es mi infierno, cuando el cuaderno ya no me entiende. Es mi cielo, mi despertar, sigo siendo libre. Hoy vuelvo atrás y observo desde la distancia, traigo mercancías de nuevo, nuevas sustancias justo a tiempo. Y es su fragancia la que me envuelve, recuerde que nunca es tarde si es hora de volver. ¿Qué piensas?, ¿no te cansas de viejas promesas? Bien sabes que sobre mi mesa es entre tus rejas, entre valdosas, la soga estuvo allí en mi cuello, son cosas de los sueños. Despiertas y todo es tan extraño, miro al mundo y él me cuenta ese secreto, que cojer el micro es el reto de un joven inquieto. Y así vuelvo a conquistar, a pensar antes de hablar de nuevo sobre un ritmo, y estés para no juzgar. Hoy vengo sólo, es Lom C un único símbolo. Sin dolor, lejos de ese círculo, encontré el estímulo, y tengo el timón de mis palabras y mis actos. Son cálculos exactos, prepárense para el impacto. Corazón intacto, lejos de tantos cuentos; la solución la llevo dentro. Yo y mis asuntos es tradición, en mi habitación, rimas de acero. Hoy traigo conversación, es lo que quiero, y no venceros. Es mi edén, cuando te veo bien, ves mi sonrisa. Es mi cárcel, cuando me encierro y voy con prisa. Es mi infierno, cuando el cuaderno ya no me entiende. Es mi cielo, mi despertar, sigo siendo libre. Es mi edén, cuando te veo bien, ves mi sonrisa. Es mi cárcel, cuando me encierro y voy con prisa. Es mi infierno, cuando el cuaderno ya no me entiende. Es mi cielo, mi despertar, sigo siendo libre. Sigo siendo libre, sigo siendo libre. Sigo siendo libre, sigo siendo libre.