DOMINGO CONTEMPLATIVO DE LA REALIDAD
Nos enseñaste que la voz de Dios está presente
En todo aquél que vive en las tinieblas y el error.
Nos enseñaste que la voz de Dios está gritando
Y pide que seamos luz en toda oscuridad.
Tu testimonio fue vender tus libros más preciados
Y socorrer a aquél que pasa hambre y soledad.
Te duele tanto la pobreza y la confusión,
Que te consagras sin tardar a la predicación.
PADRE SANTO DOMINGO,
PADRE SANTO DOMINGO DE GUZMÁN,
PREDICADOR DEL EVANGELIO,
PREDICADOR DE LA VERDAD.
QUE JAMÁS CERREMOS NUESTROS OJOS
ANTE EL SUFRIMIENTO Y EL DOLOR,
QUE PODAMOS VER A JESUCRISTO,
PRESENTE, SIEMPRE, EN LOS DEMÁS.
Tu compasión por los humildes y los más pequeños
Te fue mostrando el camino en tu corazón.
No quieres ir a predicar luciendo privilegios,
Pues, sabes que el ejemplo basta para convencer.
Tu inagotable caridad te vuelve tan sensible,
Que sientes como tuyo el dolor de los demás.
Tu celo por las almas es tan grande y tan profundo,
Que oras tanto por la conversión del pecador.
Ayúdanos, igual que tú, a renunciarlo todo,
Para poder así emular la vida del Maestro.
Ayúdanos a desprendernos de nosotros mismos
Y así, con libertad, poder servir a los demás.
Que cada uno de nosotros pueda ver en ti
El faro que conduce nuestros pasos hacia Dios.
Ayúdanos a iluminar el mundo en que vivimos
Y nunca ser indiferentes a la realidad.