Hierven los clubs y los adolescentes
comen pastillas de colores.
Harto de malvivir el siglo veinte
muere de mal de amores.
Los hechiceros de la tribu resucitan
para invertir en mis pecados
y hacen los traficantes de estampitas
su agosto en el supermercado.
Y la mentira vale mas la verdad
y la verdad es un castillo de arena
y por las autopistas de la libertad
nadie se atreve a conducir sin cadenas.
Estribillo:
Y yo me muero de
ganas de decirte que
me muero de
ganas de decirte que te quiero.
Y que no quiero que venga el destino a vengarse de mi
y que prefiero la guerra contigo al invierno sin ti.
Cada maáana salto de la cama
pisando arenas movedizas,
cuesta vivir cuando lo que se ama
se llena de ceniza.
Y por las calles va solo el corazón
sin un mal beso que llevarse a la boca
y sopla el viento frio de la humillación
envileciendo cada cuerpo que toca.
(Estribillo x2)