Oyo cada paso por el tacon martillaban en dirrecion de su auto pero el ocupado quitando el sosten de su companera No supo ni siquiera que venia su mujer Adios dijo ella y no alzo la voz pero antes la abofeteo por aquella escena infiel el orgullo tapo su dolor detras de la rabia pero ya las lagrimas se echaban a correr Y un coro canta Ya vez uno y uno es igual a tres y dos ya no se llevan bien siempre habra un deseo para complacer y al son que le toquen el corazon bailara sin calcular cuanto llanto amargo van dejando atras Ayer en un barrio de otra ciudad otro caso muy similar un marido encontro a su amigo y a su gran amor en mitad de un beso se veia el exceso de lujuria y pasion Pues bien sobre el muslo de aquella infiel se paseaba la mano cruel de la falsa amistad y un testigo fue parte y fue en aquel juzgado y con pistola en mano se nego a perdonar y un coro canta Ya ves uno y uno es igual a tres y dos ya no se llevan bien siempre habra un deseo para complacer y al son que le toquen el corazon bailara sin calcular cuanto llanto amorgo van dejando atras Y vuelven a jugar a las escondidas, a la querida y el don Juan