Mi alma glorifica al Señor
Y mi espíritu se alegra
En Él que me salvó
Porque mi humildad miró
Desde ahora y para siempre
Todas las generaciones me dirán...
¡Bienaventurada!
Entre todas las mujeres
De Dios, la más amada
¡Bienaventurada!
Porque el poderoso obras grandes hizo en mí
Infinito es su amor con los que le aman
Derrotó a los engreídos y a los pobres ensalzó
Y por eso mi alma canta
Y me hace sentir
¡Bienaventurada!
Entre todas las mujeres
De Dios, la más amada
¡Bienaventurada!