De pronto frena el orden
Del centro brota un cristal
No hay que saber de caminos
Eso ya esta demás en estos tiempos tan inciertos
Abarca un instinto
Uno que desnude a esa vanidad
Donde se oculta un deseo
Y entonces no cesa el grito
Dañado por el cristal
Es un sendero enfermo
Desviste al deseo