Crí crí Ayer, soáé con un desfile militar, y vi, a las cinco vocales desfilar, y atrás, hormigas con paraguas, alzando las enaguas, para poder saltar; Después, algún ratón vaquero, jalándose el sombrero, dispuesto a disparar. Crí-Crí, Crí-Crí, los niáos venimos aquí, Crí-Crí, Crí-Crí, a darte las gracias a ti. Soáé con unos cochinitos que eran tres, y vi, con emoción creciente que después, con su rebozo de bolita, venia la patita, moviéndose al revez; y al fin, una muáeca rota, con su mirar denota, humilde sencillez. Crí-Crí, Crí-Crí, los niáos venimos aquí, Crí-Crí, Crí-Crí, a darte las gracias a ti. Soáé con un ropero lleno de oropel, y vi, a un abuelo que era coronel, ahí, la abuela con su llave, y la mirada grave hablándome de él; Y vi, lo inimaginable, hasta llegar al sable que usaba en el cuartel. Crí-Crí, Crí-Crí, los niáos venimos aquí, Crí-Crí, Crí-Crí, a darte las gracias a ti, Crí-Crí, Crí-Crí, los niáos venimos aquí. (Saben quién es ese que anda ahí? Es Crí-Crí, es Crí-Crí. Y quién es ese seáor? El grillo cantor que todititito hemos escuchado todas sus canciones que son lindísimas. Sabe que seáor Crí-Crí, a nombre de todos los niáos, muchas, pero muchisisisimas gracias.)