La locura
Nunca tuvo maestro
Para los que vamos a abogar
Sin rumbo perpetuo
En cualquier otra dirección
Con tal de no domar
Los caballos de la exaltación
La rutina hace sombra a las pupilas
Que se cierran a los disfrutes que nos quedan
¡Avalancha!
Necesitamos
El valioso tiempo
Que abandona sin saber
Qué cojones hacer con él
Nosotros somos la comida
Y alguien está efectivamente hambriento
No hay retorno a la conciencia
Tras el desvarío del amor tempestuoso
¡Avalancha!
Aún nos quedan cosas por hacer
Si no das un paso te estancas
Aún nos quedan cosas por decir
Y no hablas
La locura
Nunca tuvo maestro
Para los que vamos a abogar
Sin rumbo perpetuo
La muerte sera un adorno que pondré al regalo
De mi vida
La luna ejerce extraños influjos
Que se contradicen
Y no hay quien descifre
¡Avalancha!