Todo llega y nada espera
Mientras distraigo al enemigo
Escondido en una piedra
Busca dentro de tu ombligo
Como el agua rota que cae en gotas
Tantos instantes tendré que adivinar
Exiliado a este cuerpo
Ya no podré regresar
Siembran en el alto del mar
Abismos envueltos en viento
Acurrucados en la sal
Espiando al silencio
Que no guía una vez más
De la mano hacia su centro
Hora de cosechar y desenterrar
Los puños de la arena que nos atrapa el cuerpo
Hora de cosechar y desenterrar
Los puños de la arena que nos atrapa el cuerpo
Rompe el huracán la cáscara del mar
Los médanos caen; las casas, quietas
Rompe el huracán la cáscara del mar
Los médanos caen; las casas, quietas
Rompe el huracán la cáscara de sal
Las paredes caen; los cuadros, quietos
Rompe el huracán la cáscara de sal
Las paredes caen; los cuadros, quietos